El PP pide para los pederastas penas similares a las de los etarras

Al calor de la desgracia de la niña Mari Luz Cortés, presuntamente asesinada por un pederasta que estaba en libertad por la negligencia de uno o varios jueces, el PP presentó ayer su primera propuesta parlamentaria en materia de Justicia: endurecer las penas contra ese tipo de delincuentes y controlarlos, una vez cumplan la condena y vuelvan a la calle, para que no reincidan. Soraya Sáenz de Santamaría, recién designada portavoz popular en el Congreso, se estrenó anunciando esta polémica iniciativa pero sin concretarla; fuentes de su equipo aclararon más tarde que el objetivo es elevar las penas hasta "casi equipararlas" a las penas por terrorismo.

Las agresiones sexuales a menores están castigadas con un máximo de 10 años de prisión (15 años si son violaciones). Los delitos de terrorismo, con un máximo de 20 años (30 si causan la muerte de personas).

La proposición no de ley del PP tiene tres patas: "Elevar de forma ejemplar" las penas por delitos contra la libertad sexual cuando la víctima sea "especialmente vulnerable" (niños, enfermos, ancianos); garantizar que los autores de esos delitos cumplen "la integridad de su condena"; e introducir "medidas más eficaces de seguridad que permitan el control y la prevención del riesgo que entraña la puesta en libertad de delincuentes patológicos con pronóstico elevado de reincidencia".

¿Qué significa que los pederastas cumplan "la integridad de su condena?". "Es una cuestión técnica, nada más. Se modificaría el artículo 76 del Código Penal para que quedara claro que, si las penas son similares a las de terrorismo, el tiempo máximo que un pederasta pueda pasar en prisión sea también similar: cerca de 40 años [en caso de sumar varios delitos]. Y tampoco decimos que tengan que ser penas tan altas como las de terrorismo, pero sí muy similares", subrayó un responsable del Grupo Parlamentario Popular.

Debate "con serenidad"

En cuanto al "control" de los pederastas -una vez cumplida su condena- para que no reincidan, el PP cree que podrían "estudiarse" mecanismos como las pulseras localizadoras, órdenes de alejamiento o de comparecencia periódica ante el juez o la creación de registros con los nombres de los condenados. ¿Y el debate reabierto sobre la cadena perpetua? "Pedimos que se hable con serenidad de todas las posibilidades de los distintos sistemas judiciales, dentro de los márgenes que establece la Constitución", se limitó a responder ayer la portavoz del PP. La Constitución recoge como objetivo la reinserción de los presos.

En este primer paquete de iniciativas, el PP ha incluido otras seis: dos económicas -aumentar la deducción por compra de vivienda y bajar el impuesto de sociedades-; una proposición para incrementar los medios contra la violencia machista; otra para modernizar los juzgados, una más para enseñar inglés en las guarderías y otra que propone ampliar en 15 días los permisos de maternidad y paternidad.