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Zapatero exigirá a Rouco respeto a los cambios en la ley de Libertad Religiosa

El presidente tratará de evitar una campaña contra la reforma del aborto

Anabel Díez

"Yo lo voy a intentar; voy a procurar mantener una relación más fluida con el cardenal Rouco". Éste fue el escuetísimo comentario que José Luis Rodríguez Zapatero formuló el pasado 5 de marzo, en plena campaña electoral, 24 horas después de que Antonio María Rouco Varela, de 71 años, fuera elegido presidente de la Conferencia Episcopal.

El cardenal ganó por 39 votos frente a 37 de Ricardo Blázquez, con quien el Gobierno socialista, y el propio presidente, había mantenido una relación más sosegada que con el ganador, durante una legislatura en la que la cúpula de la Iglesia católica había mantenido una actitud de gran hostilidad contra el Gobierno socialista.

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El PSOE ganó las elecciones cinco días después de que Rouco fuera elegido. Y un mes después, el Congreso de los Diputados elegía a Zapatero presidente del Gobierno por segunda vez.

Hoy, frente a frente, ambos se presentarán sus respectivas credenciales en una reunión que se celebrará al mediodía en el palacio de la Moncloa. En la víspera, de un lado y de otro, se evitaban previsiones excesivamente optimistas y se limitaban a confiar en que tras esta reunión las relaciones entre el Ejecutivo y la jerarquía católica sean "normales".

Y con toda normalidad, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, previsiblemente a requerimiento de Rouco Varela, le informará de que, en efecto, cumplirá el programa electoral que sometió al voto de los ciudadanos, por lo que está en marcha la reforma de la Ley de Libertad Religiosa, que recogerá la realidad de la España de hoy con la existencia de otras creencias religiosas con un arraigo notable.

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También conocerá el presidente de la Conferencia Episcopal que las resoluciones sobre laicidad aprobadas en el reciente congreso del PSOE no son papel mojado y que habrá una progresiva eliminación de símbolos religiosos en los lugares públicos. La reforma de la Ley del Aborto podría una realidad en dos años, y se abre la puerta a la reflexión sobre la eutanasia.

Todas estas materias son vistas con muy malos ojos por la jerarquía eclesiástica, por lo que Zapatero está preparado para que el prelado le manifieste su disgusto. Zapatero, le pedirá respeto a las leyes. Ahora bien, por el contrario, el jefe del Ejecutivo dará plenas garantías al jefe de la Iglesia católica en España, de que no habrá revisión de los acuerdos de la Iglesia con el Estado, tampoco se tocará la financiación de la Iglesia ni la situación de los colegios concertados que viven sustancialmente de los Presupuestos del Estado.

Y en el terreno amable y de los acuerdos seguros se situará un rotundo de Zapatero a la petición de ayuda de la Iglesia para que en agosto de 2011 el Estado arbitre los medios necesarios para la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud en Madrid, convocada por el Papa Benedicto XVI. La Iglesia Católica prevé que unos dos millones de fieles se reúnan en la capital de España, por lo que la colaboración del Estado es imprescindible en muchas vertientes. "La colaboración para esta celebración será absoluta", señalan fuentes gubernamentales.

Estos mismos interlocutores señalan que no hay una relación cerrada de asuntos; el temario está abierto. Pero las respuestas ya se conocen de antemano, de un lado y de otro. Las reformas y las leyes que promovió el Gobierno socialista la pasada legislatura van a permanecer. Ya sea el matrimonio entre personas del mismo sexo o la asignatura de Educación para la Ciudadanía. Pero Zapatero también recordará a Rouco que en España está garantizado el derecho a recibir la enseñanza de religión católica a quien lo desee.

Respeto mutuo. Será la expresión que más utilizará el presidente, según fuentes de su entorno, junto a una petición: que no se repita el comportamiento de la cúpula eclesial católica de los últimos cuatro años, caracterizado por una oposición radical desde las iglesias y la calle.

Siete meses de tensión entre el Gobierno y la Iglesia

Manifestación por la familia

- 30/12/2207. Unas 160.000 personas se manifiestan en Madrid convocadas por la Iglesia. Un acto a favor de la familia se convirtió en un ataque al Gobierno. El cardenal de Madrid, Antonio María Rouco Varela, sentenció: "El ordenamiento jurídico ha dado marcha atrás".

La 'nota' electoral

- 31/1/2008. La Conferencia Episcopal publica una nota electoral criticando leyes "que son gravísimamente injustas y deben ser cambiadas por lesionar derechos fundamentales". Piden el voto para quien defienda el matrimonio entre hombre y mujer y critican el diálogo con ETA.

El caldito con el nuncio

- 7/2/2008. En plena bronca con los obispos, el nuncio del Vaticano en España, Manuel Monteiro, invita al presidente del Gobierno a tomar "un caldito" para hablar sobre las relaciones entre el Estado y la Iglesia. La cena se produjo una semana después, sin caldito.

Congreso 'laicista' del PSOE

- 6/7/2008. El 37 congreso del PSOE termina con propuestas sobre laicidad mucho más limitadas que las que se plantearon en su inicio. La ponencia rechaza pedir la revisión de los acuerdos con la Santa Sede, pero recuerda a la Iglesia que los privilegios no son eternos.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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