Miranda Kerr, frente a la cámara de Orlando Bloom
Uno delante y otro detrás de la lente, el matrimonio protagoniza una campaña publicitaria
Se fueron de vacaciones a Nueva Zelanda, pero lo último que hicieron fue descansar. Miranda Kerr y Orlando Bloom son los protagonistas de la última campaña de la marca Rag & Bone, uno tras la cámara y la otra delante de ella. Es decir, el actor ha ejercido de fotógrafo, mientras su mujer ha seguido sus instrucciones, posando de lo más casual y sexy en unos paisajes naturales que brindan aun más espontaneidad a la sesión.
El resultado: unas fotos que forman parte de la campaña DIY (siglas de la expresión do it yourself) de la prestigiosa firma neoyorquina, que tiene como propósito explotar el talento de las modelos (que en este caso cuenta con el apoyo de su marido) delante y detrás de la cámara.
En el trabajo también participa la topmodel Lily Aldridge, amiga cercana de Kerr y compañera de Victoria's Secret, que tomó fotografías de la australiana en Nueva York. Otras participantes en esta original campaña son las modelos Karolina Kurkova y Carolyn Murphy.
Otra campaña que demuestra que el cuerpo de Miranda Kerr no sufrió perjuicio alguno tras el embarazo de su hijo Flynn, que nació el pasado enero. Tan solo tres meses después, la modelo australiana ya pudo volver a posar. De hecho, la semana pasada anunció que su regreso será coronado por las ya míticas alas de ángel de Victoria Secret en el próximo desfile de la firma el 29 de noviembre en Nueva York.
