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El contable de Berlusconi asegura que "sólo pagaba con su autorización"

La fiscalía cree que en el despacho de Giuseppe Spinelli hay documentos relevantes para la investigación sobre el primer ministro italiano por prostitución de menores

El contable del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha asegurado que sólo ha pagado dinero a cuenta del mandatario con su autorización expresa. Además ha afirmado que se ha "inflado intencionadamente" el caso Ruby, el de la joven marroquí que acudió cuando era menor de edad a las fiestas en las residencias del político.

Giuseppe Spinelli, contable de Berlusconi, es una pieza clave en la investigación, pues en su oficina la Fiscalía de Milán cree que hay documentos relevantes para el caso en el que se investiga a Berlusconi por prostitución de menores y abuso de poder.

En una entrevista que publica hoy el diario italiano "Corriere della sera", Spinelli explica que en su oficina era habitual dar dinero a cuenta de Berlusconi a la gente que llamaba para pedir ayuda y eso es, según él, lo que ha ocurrido con el caso Ruby. "Yo pagaba, pero sólo si estaba autorizado", comenta el contable, que, ante la pregunta de si quien autorizaba finalmente esos pagos era Silvio Berlusconi, responde: "Sí. Se lo preguntaba a él porque yo no hacía nada si no estaba autorizado".

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A la oficina de Spinelli en Milán se dirigieron el pasado viernes agentes de Policía, pero no pudieron entrar porque goza de inmunidad parlamentaria por estar considerada como parte de la secretaría política del diputado Berlusconi. De ahí que el Parlamento deba ahora decidir si se procede al registro. "En mi opinión se trata de cosas infladas sin mesura, porque por medio está quien sabemos. Al final, si se mira bien, las llamadas no son muchas. Y luego, ¿no se puede ayudar a la gente?", afirma el contable, quien dice tener la conciencia tranquila y estar "sereno".

"Ocurría que un día se ayudaba a una organización de niños enfermos de leucemia. Y otro quizá a una estudiante para pagar la universidad o el alquiler. No querría que quedara el concepto de que esto de las chicas fuera una cosa de gran peso. En la economía de mi jornada de trabajo me ocupaba diez minutos", añade.

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"Ruby era muy insistente"

Spinelli recuerda que sobre "estos casos" hicieron "alguna cosa" entre junio y julio pasados, pero "siempre ayudando a personas en dificultades", entre ellas, dice, Ruby, quien tenía 17 años cuando acudió en, al menos, ocho ocasiones a la mansión de Berlusconi en Arcore, próxima a Milán. "Ruby era muy insistente. Yo le respondía que 'nones'. Ella llamaba y le decía: espera. Una vez que yo no estaba, ella vino sin avisar y se le dijo que se fuera. Decía que no tenía dinero para pagar el taxi. Le dieron 50 euros, pero ella quería 100", apunta el contable de Berlusconi.

Spinelli dice que él no es una persona que derroche y que por eso no daba nada a nadie sin que le hubieran avisado antes y le hubieran autorizado. Asegura además que cuando Berlusconi le permitía dar dinero a algunas chicas pensaba que eran "personas en dificultades, quizá jóvenes madres, o que tenían que pagar la universidad". Según informa hoy "Corriere della Sera", en las escuchas telefónicas realizadas por la Fiscalía de Milán figura la voz de Berlusconi sólo en cinco o seis ocasiones y ninguna corresponde a conversaciones con la propia Ruby, a quien el primer ministro le pudo regalar, refiere el diario, un collar de oro con una cruz de esmeralda valorado en 1.500 euros.

En el sumario de la Fiscalía de 389 páginas, que ha llegado ya al Parlamento para que éste autorice nuevo registros, queda documentada la existencia de un sobre con 5.000 euros, en diez billetes de 500, que supuestamente Spinelli le dio a Ruby a cuenta de Berlusconi. El primer ministro, en un nuevo vídeo, negó ayer que haya mantenido relaciones sexuales con Ruby y atacó a la Fiscalía, una declaración que no ha hecho sino encender aún más los ánimos, con el centro-derecha que le exige ya o que dimita o que se convoquen elecciones anticipadas.

Un manifestante durante una protesta contra el primer ministro Silvio Berlusconi muestra una pancarta que dice: "A mi hija no la vas a coger"
Un manifestante durante una protesta contra el primer ministro Silvio Berlusconi muestra una pancarta que dice: "A mi hija no la vas a coger"AFP

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