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Galapagar prohíbe el 'burka' en las dependencias municipales

La oposición acusa al PP de crear una cortina de humo para eludir las irregularidades detectadas por la Cámara de CuentasUn edil popular dice que las mujeres se ven "subyugadas" por tener una religión

Los nueve concejales del Partido Popular de Galapagar lograron ayer aprobar una moción en el pleno del Ayuntamiento que pide al equipo de Gobierno del mismo partido que prohíba el uso de velos integrales en las dependencias municipales: el burka, que es una prenda que tapa de cabeza a los pies a las mujeres y que solo dispone de una rejilla para la visión; y el niqab, que cubre a la mujer de forma integral y cuya abertura para la visión puede ser más amplia. Esta prohibición, la primera en un municipio de la región, surtirá efecto, según explicó el propio alcalde, Daniel Pérez (PP), cuando se desarrolle el reglamento de uso de las instalaciones municipales en septiembre.

Los socios en el Gobierno municipal de los populares, los dos ediles de la Plataforma de Vecinos de Galapagar, se abstuvieron, mientras que hubo tres votos en contra (uno de IU, otro del Foro Verde y otro de una concejal no adscrita). En la votación no se encontraba presente ningún concejal del PSM ni del Centro Democrático Liberal (CDL), al haberse ausentado del mismo como medida de protesta al denunciar públicamente que el pleno no se había convocado con la "suficiente antelación". El PSOE llevará la convocatoria del pleno al Defensor del Pueblo y ha anunciado la impugnación de la votación celebrada ayer en el Consistorio. La ausencia de los ediles de la oposición provocó el enfado del alcalde, quien en reiteradas ocasiones les lanzó duras críticas, llegando a asegurar: "No han tenido el decoro ni la vergüenza de asistir al pleno alegando no sé qué motivos".

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El concejal del PP Pedro Hernández, encargado de explicar la iniciativa, justificó la prohibición: "Los velos integrales son un símbolo de la sumisión de la mujer al hombre". Este edil leyó de forma literal la moción, en la que los populares instan al Gobierno municipal "a prohibir en edificios e instalaciones municipales el uso de velos integrales (burka o niqab), así como cualesquiera otros atuendos que oculten el rostro y dificulten la identificación de la persona por tratarse de una discriminación que no está amparada por la libertad religiosa al ser contraria a la dignidad de las personas".

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La iniciativa fue rechazada por los tres ediles de la oposición que permanecieron en el pleno. Acusaron al PP de utilizar el tema como "cortina de humo" para eludir la discusión sobre las irregularidades detectadas por la Cámara de Cuentas en la gestión municipal entre 2004 y 2006, según la concejal de Coalición Activa-IU, Yolanda Rodríguez.Por su parte, la concejal no adscrita Ángeles Martín consideró que la moción del PP, que apela a la seguridad como justificación para prohibir los velos integrales, no era necesaria "porque ya es obligatoria la identificación de las personas en las dependencias municipales".

Pero el más hostil con la medida de los populares fue el representante de la formación Foro Verde, José Luis Barceló, quien calificó la moción de "islamófoba". Si el objetivo de la misma es facilitar la identificación de las personas por motivos de seguridad, no hacía falta, defendió, una referencia expresa al Islam. También aludió a otro motivo que podría hacer innecesario prohibir estas prendas. Y es que, dijo, "no hay burkas en el municipio de Galapagar". Algo que corroboraron a este periódico personas que asisten regularmente a la mezquita de la localidad, situada en la calle de Veracruz.

Tras finalizar el primer debate en el Pleno, el turno de las réplicas elevó la tensión, que llegó al máximo cuando el edil del PP Pedro Hernández dijo que los populares adoptaban esta decisión como compromiso con los vecinos: "Sobre todo con las vecinas que por tener una religión se ven drásticamente subyugadas, precisamente a su falta de identidad".

Otras de las intervenciones polémicas fue la de Luis Remacha, edil de la Plataforma Vecinal, socia del Gobierno, que llamaba la atención sobre la indeterminación del texto de la moción. Se dirigió al PP pidiendo que explicaran bien a los vecinos de Galapagar las diferencias entre el burka, el niqab y el velo: "Muchas personas no saben diferenciarlos".

Incluso este edil llegó a confundir el contenido de la iniciativa, al destacar que este desconocimiento de los vecinos podía generar "algún enfrentamiento en las calles". Olvidaba que la moción de los ediles del PP, sus socios de gobierno, se circunscribe exclusivamente a las dependencias municipales.

Este punto es el que más preocupa al secretario general de la Comisión Islámica de España, Mansul Escudero, quien dijo que el efecto dominó que la prohibición del velo integral está provocando en los Ayuntamientos españoles obedece al "posible tirón electoral" que pueda tener esta medida, pero advirtió de que estas iniciativas "estimulan la islamofobia".

El propio alcalde de Galapagar reconoció en el Pleno que la prohibición de llevar los velos integrales "no es un problema para los marroquíes que viven aquí, ya que en su país no es nada corriente que los lleven las mujeres". En este mismo sentido, Pérez explicó a los medios de comunicación que en la localidad no se ha detectado el uso del burka, aunque sí ha habido constancia del uso del niqab un par de veces. No obstante, y tras la pregunta del edil de Foro Verde sobre si la enmienda incluía la prohibición de entrar en el Ayuntamiento con un casco de moto, puntualizó que la moción no solo se refiere al uso de velos integrales, sino a cualquier prenda que oculte el rostro, y citó el pasamontañas o el casco de moto, entre otros atuendos.

"Lo que pretendemos es regular este tipo de situaciones para que no se produzcan", especificó el alcalde. "Si podemos evitar un solo caso en el que cualquier mujer se vea discriminada; o que se pretenda entrar en cualquier instalación municipal con un pasamontañas, con un velo integral, o con cualquier otra prenda que impida la identificación, entonces bienvenida sea esta moción".

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, criticó ayer que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "lo prohíba todo menos el burka". Una prenda que, a su juicio, "representa la sumisión de la mujer a su padre o su marido, sin tener cabida en la sociedad española". "Creo que, desde luego, en los espacios públicos el velo integral no tiene cabida. Me sorprende que Zapatero, al que tanto le gusta prohibir, lo prohíba todo menos el burka. Prohíbe los crucifijos, el tabaco, ahora las golosinas, las coca-colas, todo menos el burka", aseveró la jefa del Ejecutivo madrileño, preguntada por la moción presentada por su partido en Galapagar, informa Europa Press.

En las filas socialistas, la secretaria de Políticas de Igualdad del PSM, Carmen Toledano, que también es concejal de esta formación en Galapagar, tildó de "absurda" la presentación de la moción por parte del PP para prohibir el burka, puesto que "lo único que pretende es desviar la atención sobre los verdaderos problemas del municipio". La edil alerta de que la iniciativa del PP pueda producir algún tipo de tensión: "Si lo que querían era mejorar la situación de la mujer podían haber empezado por restituir la concejalía que se encargaba de estos asuntos", dijo Toledano.

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