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Multa al PSM por realizar obras sin licencia en su sede

Los socialistas tendrán que pagar 124.500 euros al Ayuntamiento

Las obras que el PSM llevó a cabo en su nueva sede del Palacio de la Prensa serán más caras de lo presupuestado. Los socialistas deberán pagar 124.500 euros de multa por iniciar los trabajos sin los permisos municipales necesarios en un edificio que goza de una alta protección arquitectónica, según indicaron ayer fuentes de la Junta de Distrito Centro, encargada del tramitar el expediente.

La sanción podría haber sido mayor. El Ayuntamiento ha archivado un segundo expediente abierto el pasado mes de marzo, cuando se impidió a los inspectores municipales el acceso al edificio. "En este caso se ha tenido en cuenta que no fue el PSM el responsable de ese hecho, sino la empresa constructora", indicaron fuentes municipales. La multa por obstaculizar la labor de los técnicos del Consistorio podría haber alcanzado los 600.000 euros.

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La sanción impuesta a los socialistas se basa en un informe del pasado 27 de marzo, en el que los inspectores municipales señalaban que se habían demolido falsos techos y tabiquería, desmontado la carpintería de la cuarta planta del edificio, el chapado de los baños y la instalación de aire acondicionado, fontanería y electricidad, según informó ayer El Mundo. Según los funcionarios, las obras carecían de licencia, por lo que calificaron los hechos de "graves".

Un portavoz del PSM indicó ayer que recurrirán la multa impuesta por el Ayuntamiento y justificó el inicio de los trabajos sin los permisos: "Pensábamos que la licencia se había concedido por silencio administrativo".

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El PSM solicitó el pasado 30 de enero una licencia para la remodelación de la segunda y la cuarta planta del edificio del Palacio de la Prensa por un presupuesto que ascendía a 180.000 euros. El objetivo era trasladar su sede a este edificio ubicado en la plaza de Callao y construido en 1929 por Pedro Muguruza. Pero antes de que se tramitase el permiso necesario, la empresa contratada inició los trabajos.

Los socialistas explicaron entonces que tan sólo se había llevado a cabo la limpieza del local y la retirada del mobiliario e instalaciones ajenas a la estructura del edificio. Los inspectores municipales certificaron, por el contrario, que los trabajos puestos en marcha requerían de una licencia que aún no había sido concedida por la Junta de Distrito.

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