"Colombia ha optado por la cultura como mejor salida"

Colombia es una de las grandes potencias de la escritura latinoamericana, al nivel de Argentina, México y Perú. Tiene una fuerza literaria fuerte y joven. Cuando vas a Bogotá se nota la efervescencia cultural y la creatividad. Se diría que, después de tantos años de violencia, han optado por la cultura como mejor salida". Nubia Macías, directora de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, habla con entusiasmo del invitado de honor de la feria de este año y dice convencida que, literariamente, Colombia no es sólo Gabriel García Márquez. "Empiezas a desgranar la lista de autores colombianos y te salen muchos y muy buenos, que se han despegado de lo que era la literatura de Gabo y exhiben un estilo propio".

"La decisión de no incluir a Fernando Vallejo en la delegación de escritores colombianos fue del país invitado"

"Desde hace cuatro años impulsamos el mercado de derechos en nuestro idioma. Queremos provocar que el libro circule"

Nubia Macías (San José de Gracia, Jalisco, 1966) dirige la FIL desde 2003, aunque ya trabajó en la feria entre 1987 y 1992. Luego se fue a Madrid, donde obtuvo el Máster de Periodismo de EL PAÍS en la séptima promoción. Durante los ocho años que vivió en España fue corresponsal de Radio Centro México y El Financiero. Regresó a México en 2000, trabajó año y medio en el diario Público de Guadalajara, hasta que la llamaron nuevamente de la FIL.

La directora de la feria subraya el esfuerzo realizado para mostrar "toda la variedad cultural de Colombia", que va mucho más allá de la literatura. "Vienen 62 escritores, 45 académicos, cinco grandes cocineros que participarán en un festival gastronómico, siete exposiciones, desde el Museo del Oro a un colectivo popular que recoge las expresiones populares colombianas, 14 agrupaciones musicales y teatrales... El rey de reyes del vallenato, Fonseca. Hemos organizado un ciclo de cine de lo mejor que se ha producido en los últimos años. Es un programa bastante potente".

En el acto inaugural estarán Gabriel García Márquez, Álvaro Mutis, Carlos Fuentes, Fernando del Paso "y todos los que nos quieran acompañar". "También vendrá Sergio Fajardo, alcalde de Medellín y responsable de la transformación de la ciudad, que participará en un encuentro coordinado por el fiscal español Carlos Castresana sobre el impacto social de los movimientos del narcotráfico y la violencia en general".

"La decisión de no incluir a Fernando Vallejo en la delegación de escritores colombianos fue del país invitado, a quien corresponde decidir quiénes van a la FIL en representación del país. "La FIL no influye en la decisión de a quién se invita y a quién no. Todo lo que viene de Colombia lo decide una comisión compuesta por miembros de los ministerios de Cultura, Relaciones Exteriores, la Biblioteca Nacional de Colombia, los editores colombianos, el Club de Lectura, Comercio Exterior. Son en total siete instituciones. "La FIL respeta la decisión de Colombia. Sobre la ausencia de Vallejo no hablamos del tema, nos pareció respetable su decisión, sobre todo después de las declaraciones del escritor cuando adoptó la nacionalidad mexicana, en las que dijo que no quería tener nada que ver con Colombia".

Mil quinientos periodistas de 20 países están acreditados para cubrir la FIL 2007, en la que no se hablará sólo de Colombia. Las actividades en torno al país invitado de honor significan el 25% del programa. El resto las organiza la propia FIL, las editoriales y un sinfín de instituciones. "Queremos abarcar muchos públicos diferentes", comenta Nubia Macías, convencida de que "es mucho más que una feria del libro, es un gran festival cultural y literario y del pensamiento, con 22 foros académicos y una mesa sobre el futuro de la lengua española. La diversidad de actividades convierte la FIL en un espacio atractivo en el que todo el mundo quiere tener presencia. La UNAM, Conaculta, el Colegio de México, el Colegio de la Frontera Norte, la Universidad Veracruzana...".

En total se exhibirán 300.000 títulos y 335 novedades editoriales. "Tendremos más de seiscientas actividades durante los nueve días que dura la feria, sin contar lo que hacemos exclusivamente para niños, como talleres que promueven el gusto por la lectura. El año pasado nos visitaron 110.000 niños y tuvimos 1.250 actividades exclusivamente para ellos". El periodismo también estará presente en esta edición. "El director de EL PAÍS, Javier Moreno, presentará el nuevo diario en un coloquio sobre el futuro de la prensa en Iberoamérica, en el que participarán directores de México, Chile y Argentina".

Al repasar la evolución de la FIL, Nubia Macías recuerda que inicialmente era un espacio dedicado a vender libros para el mercado estadounidense. Tradicionalmente, llegan a Guadalajara muchos bibliotecarios del vecino del Norte a comprar libros como producto. "Desde hace cuatro años impulsamos el mercado de derechos en nuestro idioma. Somos 22 países, 400 millones de hispanohablantes, y normalmente se suelen vender los derechos para toda nuestra lengua, cosa que no hacen los anglosajones. Queremos provocar que el libro circule". "A la feria van unas 17.000 personas para hacer negocios con el libro, de 40 países, lo que da un margen de acción bastante interesante. Al mismo tiempo, se ha convertido en una gran feria de autor y en consecuencia de los lectores. El año pasado tuvimos 504 escritores. Este año andaremos sobre la misma cantidad. Para muchos agentes literarios, la FIL ya no es para ir a comprar o vender derechos, sino para escuchar a escritores, lo que vuelve más atractiva la feria.

Nubia Macías explica con orgullo que "a Guadalajara vienen autores de calidad que difícilmente llegan a México. Este año vamos a tener una mesa de literatura irlandesa, otra de literatura sueca, traeremos escritores de Vietnam, Irak, Marruecos, Túnez... La idea es ampliar cada vez el espectro. Y que toda esta gente tenga posibilidades de tener sus obras traducidas". El desafío es generar un equilibrio entre lo que es la industria como tal y la parte de difusión cultural de la feria, para cubrir todos los nichos. "La idea es trabajar para que la feria siga siendo una feria de negocio, de autor y de lectores, que son las tres líneas que hay que cubrir".

La FIL dura nueve días (del 24 de noviembre al 2 de diciembre), pero su éxito depende de la labor realizada los 356 días restantes. Las 22 personas que trabajan todo el año se dedican "a vender la feria". "Si nos creemos el éxito vamos a fracasar", advierte la directora. "Hay que vender 26.000 metros cuadrados de exposición". ¿Es negocio? "La feria gana lo suficiente para sostener un equipo de trabajo durante toda la feria -2.600 personas- y conseguir tirar el primer trimestre del año". El balance es bueno para la ciudad. "Es el evento. La gente y la ciudad se han apropiado de la feria, la sienten como algo suyo y cuando hacemos algo que no les gusta nos mandan correos, protestan. La gente habla de la feria como si fuera su feria". -