La batalla de los sexos antes que Nadal y Verdasco

Billie Jean King apareció por el Astrodome igual que si fuera Cleopatra, recostada sobre una camilla porteada por cuatro musculosos hombres disfrazados de esclavos. Bobby Riggs, 26 años mayor que ella, se presentó de forma parecida, insinuantes modelos como toda compañía. Lo llamaron Battle of the sexes, fue televisado para todo Estados Unidos y BJK, campeona de campeonas, venció la exhibición por 6-4, 6-3 y 6-3. No es un recuerdo ni un canto a la nostalgia. Es un ejemplo de la programación imposible del Abierto de Estados Unidos, que hoy prefiere un amistoso de ese estilo antes que un partido oficial: el Rafael Nadal-Fernando Verdasco de cuartos de final no se disputará antes de las 4 de la madrugada del viernes español porque primero deben juguetear Martina Hinguis y Anna Kournikova contra Pat Cash y Matts Wilander en la pista central del Abierto de Estados Unidos.

"Son dos chicas jóvenes contra dos hombres de cierta edad", justificó la organización, como si el carnet de identidad (29 años las tenistas; 45 Cash y 46 Wilander) explicara la decisión de condenar a la noche a dos atletas profesionales en beneficio de un circo para las televisiones. "La idea es que la gente que paga por la sesión nocturna tenga más que un partido", añadieron desde el Abierto de Estados Unidos.

Nadal terminó su partido de octavos contra Feliciano López pasada la 1.30 del miércoles. Verdaco acabó el suyo contra Ferrer a las 11 de la noche del martes. Los dos, probablemente, verán como una ventaja jugar en la sesión nocturna, que les procura más tiempo de descanso. Es dudoso, sin embargo, que consideren de buen gusto que un dobles amistoso retrase su partido y acorte la recuperación del que se clasifique para semifinales.

Ese es otro problema. Esto es el Abierto de Estados Unidos. Esto es Nueva York. Esto se juega en el Corona Park y aquí toca el Super Saturday, el Super Sábado: las semifinales masculinas y la final femenina se disputan el mismo día.