Los directivos del Real Madrid discrepan sobre cómo debe marcharse Ramón Mendoza
Ramón Mendoza se mantiene en la idea de dejar el Real Madrid. El cómo y el cuándo es lo que no está claro. Baraja varias opciones y, de momento, ninguna le Cuadra. Sus vicepresidentes, Mariano Jaquotot y LorenzoSanz, discrepan sobre la manera en que debe producirse su dimisión como presidente. Uno sostiene que lo aconsejable es que se marche ya y la junta termine en abril de 1995 el mandato otorgado por las urnas. Otro, que lo razonable es que todos sigan hasta elpróximo mayo. Una posibilidad, más es que Mendoza se decante finalmente por alguien de fuera de la casa. Su amigo Rafael Candel, ex presidente del Albacete y reciente socio madridista, podría convertirse en su delfín. Se asegura que ayer estuvo en Madrid.
Ramón Mendoza modificó ayer el ritual habitual ante un partido de alto riesgo deportivo. No invitó a comer a la plantilla. Sus huéspedes fueron en esta ocasión Sus directivos. Toda la junta, salvo José Merlo, acudieron a su domicilio. Más que de un almuerzo se trató de una larga sesión de junta sin la rigidez que imprime la sala M estadio Bernabéu. Mendoza les comunicó que quiere convocar elecciones anticipadas a la presidencia del club y que se reserva el momento de su fecha. No se descarta que lo anuncie en su conferencia de prensa de mañana. En el turno de intervenciones se barajó la idea de que aquellos directivos que presenten candidaturas habrán de cesar en sus cargos mientras Mendoza seguirá al frente de una junta gestora.Mariano Jaquotot y Lorenzo Sanz ya expresaron el martes sus opiniones a Mendoza. En este caso, tarilbién se detectó entre ambos un criterio dispar. Mendoza barajó inicialmente su intención de marcharse mañana -mismo dejando al frente del club a sus dos vicepresidentes, que podrían gestionarlo hasta mayo.
Dos estrategias
Las discrepáncias nacen de dos diferentes posiciones estratégicas. Hay directivos que opinan que, si se fuese en solitario, Mendoza permitiría a la junta organizar las próximas elecciones con tiempo por delante y con la posibilidad de tender lazos a la oposición, que es irreconciliable con él. En este sentido, algunos miembros de la junta han mantenido contactos informales con integrantes del grupo opositor para intentar acercar las posturas. Si, en cambio, Mendoza decidiera marcharse en mayo, coincidiendo con la conclusión del Campeonato de Liga, y convocar entonces las elecciones, no habría tiempo para formar coaliciones y todos estarían expuestos al desgaste de cinco meses más en la actual situación. Conforme pasan los días, esta posibilidad parece más remota por el detenoro progesivo que sufren los estamentos del club: empleados,. jugadores, técnicos y directivos.
La opción más indeseable por todos es una convocatoria inmediáta de elecciones, ya que dejaría el club en manos de una gestora que no tendría capacidad para tomar decisiones importantes -sobre todo, de cariz economico- en un momento especialmente crítico.
Algunos directivos consultados en lashoras previas a la reunión manifestaron su preocupación por el hecho de que la junta no fuera capaz de encontrar una decisión consensuada. Una ruptura podría desencadenar dimisiones en cadena de sus miembros. Después, uno ratificó que tienen "discrepancias sobre el cómo" debe irse Mendoza e "incertidumbre sobre el cuándo'.
Otra posibilidad que Mendoza sopesa es aún más revolucionaria: optar por alguien de fuera de la casa, pero con experiencia. El elegido para encabezar ese movimiento sería Rafael Candel, ex presidente del Albacete y amigo personal suyo. Ambos se reunieron en Madrid antes de Navidad. Mendoza le ofreció por segunda vez la opción de convertirse en su delfín -la primera fue hace ocho meses- y le dio un periodo para reflexionar. Candel estuvo ayer en el Bemabéu para hablar con él.
Candel se ha declarado madridista desde siempre, pero sólo es socio del club desde hace dos meses. Esta circunstancia le impediría por el momento presidir el club, pero no ocupar otro cargo como el de presidente ejecutivo.
