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Inquietud en los mercados

Las Bolsas de todo el mundo se desploman

El pánico se extiende por los mercados mundiales. La aparición de nuevas víctimas de la crisis hipotecaria de EE UU y el creciente temor a que la falta de liquidez en los mercados de crédito acabe perjudicando a la economía real desataron ayer una de las mayores caídas bursátiles de los últimos años. La mayoría de las Bolsas europeas entró en pérdidas anuales.

Countrywide, la mayor entidad hipotecaria de EE UU, pide un crédito de urgencia para resolver problemas de liquidez
La mayoría de los mercados europeos entra en pérdidas anuales, y el parqué madrileño sufre la mayor caída en tres años y medio
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La Bolsa de Madrid tuvo su peor día desde el 15 de marzo de 2004, la jornada posterior a las últimas elecciones generales. Su índice principal, el Ibex 35, bajó un 3,7% para cerrar en 13.979 puntos. Londres perdió un 4,1%; París y Milán, un 3,3%, y Francfort, un 2,4%. En Nueva York, después de que la Reserva Federal inyectara 17.000 millones de dólares para apaciguar los ánimos, el índice Dow Jones de Industriales llegó a ceder más del 2%. A última hora se recuperó y cerró con unas perdidas de tan sólo el 0,12%. El principal indicador de la Bolsa neoyorquina ha bajado un 10% desde mediados de julio.

La crisis desatada por las hipotecas de alto riesgo también se dejó sentir con fuerza en Asia, donde algunos indicadores se desplomaron a un nivel desconocido desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EE UU. Una inyección de 12.200 millones de euros por parte del Banco de Japón no impidió que el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio retrocediera un 1,99%. Los bancos centrales de Indonesia, Malaisia y Filipinas intervinieron para defender sus respectivas divisas. También las Bolsas latinoamericanas se contagiaron de la fiebre vendedora.

"La confusión reinante en los mercados es probablemente el mayor shock financiero de la década", afirmó el economista T. J. Bond, del gigante de los servicios financieros Merrill Lynch, en una nota de análisis. "La chispa ha saltado en el mercado de hipotecas de alto riesgo en EE UU, pero el fuego se ha extendido mucho más allá".

La última oleada de pérdidas comenzó en Wall Street a última hora del miércoles, cuando un analista de Merrill Lynch recomendó vender las acciones de Countrywide Financial, la mayor entidad de crédito hipotecario de EE UU, ante el serio peligro de que las pérdidas derivadas de los préstamos de alto riesgo la lleven a la bancarrota. A primera hora de ayer, la empresa anunció que ha tenido que recurrir a un crédito sindicado de más de 8.500 millones de euros de 40 bancos para solventar con urgencia sus problemas de liquidez.

Ansiedad

Las acciones de la compañía, que habían bajado el 13% el miércoles, caían otro 21% y a mediodía valían menos de la mitad que a principios de año. Según documentos registrados en la Securities and Exchange Commission (SEC), organismo regulador del mercado estadounidense, el presidente de Countrywide Financial, Angelo Mozilo, ha obtenido unos beneficios de casi 10 millones de euros vendiendo acciones de la empresa en jornadas recientes.

Y en Australia, las acciones de Rams Home Loans, primera empresa del sector hipotecario en ese país, perdieron un 60% de su valor tras anunciar que ha sido incapaz de refinanciar una deuda de 4.500 millones de euros por su exposición al mercado hipotecario de alto riesgo de EE UU, origen de la volatilidad en los mercados mundiales.

La incertidumbre sobre el alcance de la crisis y el miedo a que ésta acabe haciendo daño a las empresas, a los consumidores y a la economía en general mantiene a los inversores en un estado de ansiedad desde hace más de una semana. Los analistas vaticinan que los mercados no recuperarán la normalidad hasta que los bancos y los fondos de inversión no expliquen cuál es exactamente su exposición a las hipotecas de alto riesgo y sus productos derivados. Entonces podrá hacerse borrón y cuenta nueva. "Estas caídas son sólo el comienzo de una corrección y el mercado está anticipando que los tipos de interés no van a bajar en EE UU", opina Jorge Lage, analista de CM Capital Markets. "La trascendencia de la crisis y su repercusión en la economía mundial va a depender de la aparición de nuevos casos de bancos expuestos a la crisis hipotecaria de alto riesgo".

El pesimismo de los inversores aumenta ante la sensación, cada vez más generalizada, de que la Reserva Federal no recortará pronto los tipos de interés. Los mercados de futuros de EE UU habían anticipado una bajada del precio del dinero el próximo 18 de septiembre, e incluso antes, pero el presidente de la Reserva Federal de St. Louis, William Poole, echó ayer un jarro de agua fría sobre esas expectativas al declarar que la crisis de las hipotecas de alto riesgo no constituye una amenaza para el crecimiento económico y que, por tanto, sólo una "calamidad" justificaría un recorte del precio del dinero en estos momentos. "Es prematuro decir que la volatilidad en los mercados está cambiando el curso de la economía de manera trascendental", dijo Poole, miembro con derecho a voto del comité de la Reserva Federal que fija la política monetaria.

Llamamiento a la calma

En una entrevista con el Wall Street Journal, el secretario del Tesoro de EE UU, Henry Paulson, envió un mensaje de calma a los inversores al afirmar que tanto el sistema financiero como la economía en general son lo suficientemente sólidos para amortiguar los vaivenes del mercado sin provocar una recesión. Paulson, ex presidente del banco de inversión Goldman Sachs, reconoció, no obstante, que la economía notará el impacto de la crisis hipotecaria.

El sector bancario fue ayer de nuevo uno de los más castigados por la volatilidad. Las acciones del Santander cayeron un 3,7% y las del BBVA un 3,5%. BNP, Barclays, Royal Bank of Scotland, HSBC... todos registraron cuantiosos retrocesos. ABN Amro se llevó la peor parte, al caer un 5,96%.

La gestora de fondos Invesco retrocedió un 6,5% y el grupo Man, la mayor sociedad cotizada de capital riesgo en el mundo, perdió un 8,3%.

En España, donde las pérdidas de los bancos a causa de la crisis hipotecaria han sido hasta ahora mínimas, el fondo March Monetario Dinámico comunicó a la CNMV que ha restringido sus suscripciones y reembolsos al haberse visto afectada una de las instituciones de inversión colectiva en las que invierte, informa Europa Press. Se trata de Parvest Dynamic ABS, gestionada por el grupo francés BNP Paribas, que la semana pasada contribuyó al nerviosismo de las Bolsas al anunciar la suspensión de tres de sus fondos por su vinculación a los créditos de alto riesgo en EE UU.

Oficina de la entidad hipotecaria Countrywide en el Estado de Nebraska (EE UU).
Oficina de la entidad hipotecaria Countrywide en el Estado de Nebraska (EE UU).AP
Oficina de la entidad hipotecaria Countrywide, en Chicago (EE UU).
Oficina de la entidad hipotecaria Countrywide, en Chicago (EE UU).BLOOMBERG

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