El juez Pedraz cita a declarar a los ex ministros Federico Trillo y Ana Palacio
El juez del caso Couso, Santiago Pedraz, ha citado a declarar en calidad de testigos a los ex ministros de Exteriores y Defensa Ana Palacio y Federico Trillo, respectivamente, con el fin de "completar" la información que les fue transmitida por las autoridades de Estados Unidos en relación con la muerte del cámara de Tele 5 José Couso, cuando informaba de la toma de Bagdad por las tropas norteamericanas en 2003.
Palacio y Trillo eran ministros del Gobierno de José María Aznar cuando ocurrieron los hechos. Ambos tienen la posibilidad de declarar por escrito debido a su condición de ex ministros. Trillo ya se acogió a esa opción durante la investigación del accidente del Yak-42, que también se instruye en la Audiencia Nacional.
El juez Pedraz trata de reactivar el sumario después de que la semana pasada un tribunal de la Audiencia Nacional, por dos votos contra uno, revocó el auto de procesamiento que había dictado en abril de 2007 contra los tres militares responsables del disparo del tanque Abrams que mató a Couso y al reportero de Reuters Taras Protsyuk.
Testimonio tergiversado
El magistrado ha reclamado a la jefa de prensa de la Audiencia que recabe información sobre los representantes en España de las televisiones Al Yazira y Abu Dhabi, cuyas sedes fueron atacadas el 8 de abril de 2003, el mismo día del ataque contra el Hotel Palestina de Bagdad, en el que murió Couso. El juez trata de demostrar que el móvil del disparo contra los periodistas fue el amedrantamiento de los medios de comunicación, extremo rechazado por los magistrados Ángel Hurtado y Fermín Echarri.
También han sido citados a declarar tres periodistas españoles testigos presenciales del ataque, Jon Sistiaga, Olga Rodríguez y Jesús Quiñonero, cuyo testimonio fue tergiversado por el tribunal al revocar el procesamiento de los militares.
El juez ha pedido que dos técnicos en armamento determinen la capacidad destructiva del proyectil, importante para saber si el ataque fue desproporcionado y si había ánimo de matar.
