_
_
_
_
_
Primera crisis del euro | La posición alemana

Alemania pide más esfuerzo a Grecia para dar su apoyo

Los socios de Gobierno de Angela Merkel debaten la legalidad y la conveniencia de conceder préstamos

También Alemania centra estos días su atención en Grecia. Aunque los mercados siguieron ayer su recuperación, también continuaron las especulaciones sobre los apoyos que podría ofrecer Alemania a la maltrecha economía del socio griego. Durante el día de ayer, el diario económico Handelsblatt y diversas agencias de noticias, como el servicio alemán de France Presse (AFP) recogían declaraciones de "círculos gubernamentales" reacios a conceder ayudas directas.

Según France Presse, el Gobierno alemán "está convencido de la solvencia de Grecia", que ha sido capaz de colocar su deuda pública "aunque fuera a un precio elevado". Según cita la edición online del Handelsblatt, en el Gobierno se insiste en que asumir la deuda de otros Estados vulnera las normas europeas. Si bien se debaten "diversos escenarios posibles".

El partido liberal FDP dice que "no ayuda al alcohólico darle alcohol"
El Gobierno podría argumentar que se trata de inversiones y no de un rescate
Más información
Berlín y París lideran las negociaciones para el rescate de Grecia
Zapatero subraya el compromiso de España con Grecia y la solvencia de la economía española

Berlín quiere todavía "ver nuevos esfuerzos griegos por combatir la crisis", según señalaban fuentes conocedoras del debate interno a la agencia alemana DPA por la tarde. En cualquier caso, es predecible que el electorado alemán reaccione con descontento ante nuevos esfuerzos económicos por salvar a terceros: después de los bancos, ahora Grecia.

Diversos medios, entre ellos el influyente Financial Times londinense, insistían anoche en que Alemania "ha abierto la puerta" a préstamos directos o a la compra de deuda griega para evitar que la crisis se agrave. Según estas fuentes, Alemania y la Unión Europea expondrán hoy en Bruselas sus planes concretos en la cumbre informal de jefes de Estado y de Gobierno de la UE. No obstante, algunas fuentes del Ejecutivo aseguraban ayer que Alemania no espera que de la cumbre salgan decisiones en favor de Grecia. Quizás, como señalaban ayer algunos expertos, para evitar que se disparasen las expectativas sobre la cumbre.

Ayer por la mañana, el ministro de Hacienda Wolfgang Schaüble se reunió con los jefes del grupo parlamentario democristiano (CDU/CSU) para debatir las posibilidades de acción ante el posible incendio griego. Se descartó la opción de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) salga en apoyo de Grecia sin contar con la Unión Europea. Schaüble señaló que se incrementaría el riesgo de que el euro continúe debilitándose. Además, Estados Unidos tiene capacidad de veto en las decisiones del Fondo Monetario Internacional (FMI), lo que en tal caso les daría voz en el desaguisado griego. Según el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung, los democristianos barajaron la concesión de créditos o la creación de un fondo europeo. El diario Rheinische Post, por su parte, detalló que Schaüble propone que el todavía vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Lucas Papademos, asuma la labor de Representante Especial de la Unión Europea para Grecia.

Frank Schäffler, parlamentario del partido liberal FDP asociado con Angela Merkel en el Gobierno, criticó ayer el posible rescate griego: "no se ayuda a un alcohólico dándole una botella de licor dijo". Pedía Schäffler al Gobierno que tenga en cuenta el resultado del informe parlamentario sobre Grecia, que destaca las dificultades legales para ayudar a aquel país.

Según la agencia neoyorquina Bloomberg, uno de los participantes en la reunión democristiana aseguró que Schaüble considera que "la legislación europea es más flexible" de lo que el Gobierno creía. Así, sería posible conceder préstamos bilaterales o emprender la compra de bonos griegos en los mercados.

Ante las posibles trabas legales, el Gobierno podría argumentar que se trata de inversiones y no de un rescate. En cualquier caso, señalan los defensores de esta opción, el déficit medio de los países del euro no aumentaría más que en uno o dos puntos, hasta el 7% o el 8%. Por debajo del que registra Estados Unidos.

Otra posibilidad, defendida por el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, sería la emisión de un bono común europeo. También se hablaba ayer de adelantar el pago de fondos estructurales europeos a Grecia, que tiene pendientes de percibir un total de 18.000 millones de euros hasta el año 2013.

Pero pese a todas las cábalas e informaciones, oficialmente se desconoce aún la postura del Gobierno alemán. Ayer, el ministro Schaüble sólo dijo ante los periodistas que "no tendrá parte en especulaciones", respecto a la decisión final que pueda adoptar el Gobierno de Angela Merkel.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_