_
_
_
_
_

Nadal: "Mi decisión no dependía de que alguien viniera a buscarme"

El tenista desmiente a Nieto, que dijo que iba a "traer al campeón" a la Davis para justificar su viaje a Nueva York

En las ruedas de prensa, Rafael Nadal puede ser tan directo y contundente como lo son sus golpes desde el fondo de la pista. Ayer lo demostró en Córdoba, donde se acababa de incorporar al equipo español que disputará la semifinal de la Copa Davis. Su llegada estuvo envuelta en una polémica política. El domingo, el alcalde de la ciudad, José Antonio Nieto (PP), anunció a través de Twitter que viajaba a Nueva York para asistir a la final del US Open, que disputaba el mallorquín. Invitado por la Federación Española de Tenis, aseguró que hacía el viaje para que el jugador acelerase su vuelo a España y estuviese listo para su cita cordobesa. "A veces hay que hacer locuras si la ocasión lo merece. Para traer a nuestro campeón a la Copa Davis haremos Córdoba-NY-Córdoba en 48 horas", escribió Nieto.

Más información
La Copa Davis sí prefiere Córdoba
La Junta rebaja la tensión con Córdoba a causa de la Copa Davis

Hasta aquí la versión oficial del Consistorio. Pero la de Nadal es todo un revés para la tesis del alcalde Nieto y su equipo. Porque Nadal dejó claro que pensaba estar en Córdoba "el martes o el miércoles, independientemente de que viniera el alcalde a Nueva York o no viniera a Nueva York", dijo en su respuesta a la pregunta de si el viaje del alcalde había sido determinante para su presencia en la Davis.

La intervención de Nadal seguía a la de Albert Costa, el capitán de la selección española. Mucho más diplomático, el jefe del equipo aclaró que el viaje había sido iniciativa de la Federación Española de Tenis y agradeció el gesto del alcalde. Pero cuando parecía que la respuesta se quedaba ahí y otra periodista se disponía a hacer la siguiente pregunta, Nadal levantó la mano. Él también quería decir algo. "Yo, mis decisiones las tomo con anterioridad, no porque venga a buscarme una persona a Nueva York o no", reflexionó con toda calma, dejando meridianamente claro que nadie externo a su equipo le altera la agenda. "Yo defiendo a mi país y no tiene que venir nadie a convencerme cuando tengo aquí a todo el equipo para que me convenza".

A pesar de casi tres semanas jugando al máximo nivel, de ser derrotado en la angustiosa final del US Open frente al serbio Novak Djokovic, Nadal no perdió el pulso de sus palabras. Dijo estar encantado y agradecido de que el alcalde de Córdoba acudiese a Nueva York para verle y apoyarle. Pero, rodeado de sus compañeros y de un Albert Costa de mirada seria, lanzó una última andanada: "No nos confundamos sobre quién me convence a venir aquí o quién no me convence. Porque la decisión estaba tomada desde hace meses".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_