Corbacho adelanta que el paro volverá a subir en octubre

El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, no ha dado hoy muchas esperanzas de que el próximo dato de paro registrado, correspondiente al mes de octubre, no será bueno. "Octubre siempre ha sido un mes de destrucción de empleo, si usted examina la estadística de 2000 a 2007, años de crecimiento económico, la media de subida del desempleo fue de 41.000 puestos de trabajo, por lo que este año no va a ser diferente", ha adelantado el ministro en una entrevista en Telecinco.

Una vez que da por hecho que el paro volverá a subir, la incógnita está en la magnitud de este incremento. Sobre este punto, aunque Corbacho no se ha atrevido a dar una cifra concreta, sí se ha mostrado confiado en que no será tan abultado como en 2008, cuando el desempleo aumentó en cerca de 200.000 personas.

Según consta en los archivos del Ministerio, el desempleo registrado en las ofcinas públicas de empleo nunca ha bajado en este mes, con lo que este año tampoco parece que pueda darse la vuelta a esta tendencia. De hecho, una nueva subida en octubre agravaría la evolución al alza de esta estadística iniciada en agosto con 84.985 nuevos parados y ratificada en septiembre con otras 80.367 personas, más de 160.000 desempleados que acabaron con el espejismo de los descensos de mayo, junio y julio causados por los efectos del Plan E y las pequeñas obras en los ayuntamientos.

Meses malos para el empleo

Tal y como ha recordado el jefe del Departamento, los meses más negativos para el empleo en España son septiembre, octubre, noviembre y, después, enero. En consecuencia, ha añadido, la subida del paro en octubre no se deberá exclusivamente a la crisis económica, pues una parte, "pequeña o grande, depende", corresponderá al comportamiento estacional de este mes.

Sobre las causas del mal comportamiento del empleo en España frente a sus socios europeos, Corbacho ha explicado que el ajuste ha sido "muy rápido y fuerte" en España y que, mientras que en nuestro país se han hecho sobre las plantillas, en otros países, como Alemania, los ajustes han venido por el lado de los horarios laborales. En cuanto a las medidas que habría que tomar para reactivar el empleo, el ministro no ha ocultado que en España hay que hacer reformas, pero "en un sentido amplio" y no focalizado en exclusiva hacia una reforma laboral y la creación de un nuevo contrato, tal y como reclama la patronal; pues con eso, ha asegurado, no se solucionará la crisis.

En su opinión, en la reforma hay que tener en cuenta el sistema financiero y los problemas de liquidez, la necesidad de cambiar el modelo productivo y de incentivar la competitividad, y todo ello sin descartar cambios en el mercado laboral que, a priori, no incluirán el abaratamiento del despido, porque, según Corbacho, eso no es lo que se tiene en cuenta a la hora de contratar.

Desatascar el diálogo social

Para avanzar en este sentido, el ministro ha destacado la utilidad del diálogo social y se ha mostrado confiado en recuperar este foro pues "las cosas han cambiado suficientemente como para ir generando un clima de confianza". "Yo espero que antes de final de año hayan resuelto el tema (de la negociciación colectiva), y me gustaría y haré todo lo posible para que antes de final de año se reanude el diálogo social", ha comentado el ministro.

Por otra parte, Corbacho se ha mostrado confiado en que las negociaciones que se están llevando a cabo entre el Gobierno de España y los representantes de la firma canadiense Magna sobre el futuro de Opel concluyan con los resultados esperados, como es el mantenimiento de la planta que posee la empresa en Figueruelas. Según ha resaltado, la factoría de Zaragoza es la planta de mayor productividad y la más competitiva de la firma automovilística alemana en toda Europa.