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LA OFENSIVATERRORISTA

Odei Galarraga estaba acusado de participar en el asesinato del 'ertzaina' Mikel Uribe

Uno de los dos etarras muertos anoche en Bilbao al estallar los explosivos que transportaban y que ya ha sido identificado, Odei Galarraga, estaba acusado, entre otros delitos, de participar en el asesinato a tiros del mando de la Ertzaintza Mikel Uribe cuando integraba el comando Buruntza de ETA.

Galarraga se encontraba huido desde la desarticulación del "comando Buruntza" a finales de agosto de 2001 y este año el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón le procesó, en ausencia, por inducción de un delito de terrorismo con resultado de muerte al acusarle de facilitar, junto a otros procesados, los datos necesarios a los autores materiales para perpetrar el asesinato.

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La explosión de casi 15 kilos de dinamita causó la muerte de los dos etarras

Además, el magistrado también le procesó, junto a sus compañeros de comando por los delitos genéricos de pertenencia a banda armada depósito de armas de guerra y explosivos, falsificación de documento oficial y robo con fuerza.

Según consta en el auto de procesamiento por el asesinato del ertzaina, antes de cometer el atentado, los miembros del comando Odei Galarraga, Ibon Echezarreta, Luis María Carrasco, Oskarbi Jauregui, y Ainhoa García Montero, la única integrante de este grupo que permanece huida, comprobaron la información que les suministró sobre la víctima el ex dirigente etarra Javier García Gaztelu, "Txapote".

Galarraga junto a García Montero, Jauregui y Makazaga se encargó de grabar en vídeo el lugar en el que ejecutarían el asesinato, una explanada situada detrás del Ayuntamiento de la localidad guipuzcoana de Learburu.

Además a Galarraga se le relacionó con el taller de Zaldibia (Guipúzcoa) utilizado por el comando Buruntza, para preparar coches bombas y en el que fueron descubiertos 25 kilos de dinamita Titadine similar a la robada por ETA en Grenoble (Francia).

El autodenominado comando Buruntza, que actuaba principalmente en la provincia de Guipúzcoa, cometió desde julio de 2000 hasta su desarticulación una veintena de atentados en los que siete personas fueron asesinadas.

A los miembros de este comando se les considera responsables, además del asesinato de Uribe, de los asesinatos del ex gobernador civil de Guipúzcoa Juan María Jáuregui, del empresario vasco José María Korta, del cocinero de la Comandancia de Marina de San Sebastián Ramón Díaz, de dos trabajadores de la empresa Elektra y del director financiero del Diario Vasco Santiago Oleaga.

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