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CRISIS EN ARGENTINA

El presidente peronista Duhalde anuncia un Gobierno de unidad nacional para Argentina

Una de las primeras medidas será el fin de la paridad peso-dólar .-Nuevo 'cacerolazo' en Buenos Aires

El peronista Eduardo Duhalde ha asumido hoy la Presidencia de Argentina, cargo para el que fue elegido por la Asamblea Legislativa para un período de dos años. De esta manera, Duhalde cumplirá lo que resta del mandato, que concluye el 10 de diciembre de 2003. El ex vicepresidente, que perdió las elecciones en 1999 ante De la Rúa, se convierte en el quinto jefe de Estado en 15 días marcados por la incertidumbre económica y política que ha desembocado en graves altercados en las calles.

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En una ceremonia en la Casa Rosada, que ha comenzado con retraso, Duhalde ha recibido la banda y el bastón presidenciales de manos del presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Camaño, que estuvo a cargo de la jefatura del Estado de manera interina.

Con la toma de posesión de Duhalde se cierra la crisis institucional desatada a partir de la renuncia de Fernando de la Rúa, el 20 de diciembre, dos años antes de finalizar su mandato.

Después de recibir los atributos presidenciales acompañado por su esposa, Hilda González, y de firmar las actas y cantar el himno nacional, Duhalde ha sido aplaudido por los asistentes al acto, que pertenecen tanto a su fuerza, el mayoritario Partido Justicialista (peronista), como a la Unión Cívica Radical y otras agrupaciones opositoras.

Al acto, que ha durado sólo cinco minutos y donde el nuevo mandatario no ha pronunciado ningún discurso, no han asistido los ex presidentes Fernando de la Rúa, que renunció al cargo el 20 de diciembre último en medio de un estallido social, y Carlos Menem, quien gobernó en el periodo 1989-1999 y ejerce la jefatura formal del mayoritario Partido Justicialista (peronista).

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El domingo, Duhalde fue elegido presidente por la Asamblea Legislativa con los votos favorables de 262 diputados y senadores, 21 en contra y 18 abstenciones a raíz de un acuerdo entre los principales partidos políticos para conformar un Gobierno de "unidad nacional".

Gobierno de unidad nacional

Después de jurar anoche como jefe del Estado ante la Asamblea Legislativa, Duhalde se comprometió a conformar un Gobierno de unidad nacional que, además de su partido, incluya a dirigentes de la opositora Unión Cívica Radical (UCR) y de otras fuerzas minoritarias.

Duhalde anticipó que dará a conocer su gabinete mañana mientras hoy se suceden intensas negociaciones políticas para definir al equipo de colaboradores del nuevo mandatario.

"El presidente está trabajando, toda conjetura que se haga no tiene demasiado valor", ha dicho a la prensa el diputado peronista Miguel Angel Toma, a quien algunas versiones mencionan como futuro ministro de Defensa.

El trascendido más firme señala que su colega Jorge Remes Lenicov se hará cargo de la cartera de Economía y se especula con que los radicales Adalberto Rodríguez Giavarini, que fue canciller durante la gestión de De la Rúa, y Jorge Vanossi serán designados en Relaciones Exteriores y Justicia, respectivamente.

Duhalde, ex vicepresidente del país y ex gobernador de la provincia de Buenos Aires, reconoció que "Argentina está quebrada" y tiene previsto presentar el viernes un plan económico para superar una de las crisis más profundas que ha vivido el país.

Si bien no se conocen detalles del programa, el propio Duhalde confirmó la suspensión del pago de los intereses de la deuda externa, cifrada en unos 142.000 millones de dólares, una decisión que había tomado el también peronista Adolfo Rodríguez Saá, quien fue elegido presidente por la Asamblea Legislativa el 23 de diciembre y dimitió sólo siete días después.

Duhalde también ha dado señales de que propiciará una nueva política cambiaria al considerar que la "convertibilidad" que equipara el peso al dólar y está en vigor desde 1991 quedó "arrasada".

El nuevo presidente también ha adelantado que el plan de crear un millón de puestos de trabajo que lanzó Rodríguez Saá será transformado en un seguro de empleo y formación para cabezas de familia, y ha mencionado entre sus objetivos una mejora de la distribución de la riqueza.

Pero en estas horas las expectativas de los argentinos están puestas en qué hará el nuevo Gobierno con el corralito, como se conoce a las restricciones al uso de dinero en efectivo impuestas hace un mes para evitar una fuga masiva de depósitos bancarios.

Esa medida desató múltiples muestras de repudio de la ciudadanía, que en las últimas semanas ha protagonizado numerosas protestas en las que la gente salió a las calles golpeando cacerolas.

Otra de las prioridades del peronista Duhalde será la situación social después de la ola de saqueos a comercios protagonizada por los sectores de la población más afectados por la pobreza, que alcanza a unas 15 millones de personas sobre 36 millones de argentinos, según dijo Duhalde.

Nuevo 'cacerolazo'

Instantes después de que la Asamblea Legislativa decidiera la consagración del justicialista Duhalde como nuevo presidente, ha dado comienzo en las calles de Buenos Aires un nuevo cacerolazo de protesta y varios grupos de personas se han concentrado frente a las puertas del Congreso y de la Casa de Gobierno.

Sin embargo, estas protestas han sido menos intensas que las de días anteriores. En los barrios más pobres de la ciudad, los cacerolazos no han sido secundados.

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