La investigación oficial concluye que el Mi-26 ruso fue derribado por un misil

Las autoridades rusas han admitido esta mañana que el helicóptero Mi-26 con 147 personas a bordo que se estrelló el pasado 19 de agosto junto a la base militar de Jankalá, en la afueras de Grozni, la capital de Chechenia, fue derribado por un misil tierra-aire. Además, las fuerzas rusas han detenido a un rebelde checheno sospechoso de haber participado en el ataque, en el que perecieron 116 personas.

El Estado Mayor de la región militar del Cáucaso Norte, citado por la agencia ITAR-TASS, ha explicado que la comisión oficial, nombrada por el Gobierno ruso para investigar el desastre, ha llegado a esta conclusión tras hallar en el lugar de la catástrofe una lanzadera usada de un misil Strelá (Flecha), de producción rusa.

Según la versión oficial, el misil, que puede ser disparado por un solo hombre, fue utilizado por la guerrilla chechena para derribar el aparato. Además, la comisión ha ordenado hacer una revisión a fondo de los arsenales de la región militar del Cáucaso Norte, pues "hay motivos para sospechar que el misil fue robado en uno de ellos".

Rastreo en Chechenia

Horas después de la confirmación oficial, las fuerzas rusas han anunciado la detención de un hombre sospechoso de haber participado en el ataque. Según el coronel del Ministerio del Interior, Said-Selim Pechkhoev, el sospechoso, es "un miembro activo de bandas armadas ilegales" -término que se aplica a los soldados independentistas- que fue detenido ayer en una operación de rastreo en Chechenia, y es sospechoso de "otros crímenes graves".

Aunque parece triunfar la hipótesis del atentado, el Ejército ruso también ha mencionado en varias ocasiones la tesis del accidente, que apunta a que en el helicóptero viajaban el doble de personas de las permitidas y que uno de los motores podría haberse incendiado. Sin embargo, según fuentes militares, algunos testigos aseguraron haber visto el disparo del misil e incluso precisaron que el proyectil dejaba una estela, como los Strela.

En todo caso, el ataque fue reivindicado por los rebeldes chechenos el mismo día en que se produjo y los dirigentes independentistas anunciaron la concesión de condecoraciones a los seis rebeldes que participaron en él.