"No jugamos nuestro mejor fútbol"
Arjen Robben (Bedum, Groninga, 1984) es uno de esos jugadores que siempre quiere dar espectáculo. Y no conforme con marcar esta vez un golazo de cabeza a Uruguay, algo muy inusual en él, trató de volver a anotar más tarde de cuchara, errando en el intento de levantar el balón ante Muslera. Por eso, pese a la euforia de estar en la final de una Copa del Mundo, Robben cree que a Holanda le queda mucho por ofrecer. Tras su frustrado paso por España, donde jugó dos temporadas discretas en el Real Madrid, Robben habla un castellano fluido con el que respondió a estas preguntas en la sala mixta del Green Point antes de ser apremiado a abandonar el elegante estadio de Ciudad del Cabo.
Pregunta. ¿Qué le ha llegado de aquella Holanda que perdió la final hace 32 años frente a la anfitriona en Argentina 78?
Respuesta. Yo no estaba en este mundo, pero sé que es una Holanda que jugaba muy bien.
P. ¿Mejor que la actual?
R. No hemos jugado nuestro mejor fútbol, pero teníamos que ganar y lo hemos conseguido. Queríamos llegar a la final y aquí estamos. Lo más importante es que, en los seis partidos, hemos jugado como equipo.
P. ¿Y en el aspecto individual?
R. Ha sido muy difícil para mí, porque venía de una lesión y creía que no me iba a recuperar a tiempo. Pero me he recuperado mucho más rápido de lo esperado y me encuentro muy bien. Estoy incluso explosivo.
P. Su temporada, al igual que la de su compañero Sneijder, está siendo formidable. Primero en la final de la Champions y ahora en la del Mundial. Ambos fueron despedidos del Real Madrid.
R. No pensamos en eso. Tanto Sneijder como yo estamos muy felices en el Inter y en el Bayern de Múnich [donde ha marcado 20 goles en 29 partidos], y sólo pensamos en acabar muy bien la temporada. Estamos centrados en la final.
P. ¿Le gustaría jugarla contra sus ex compañeros españoles del Real Madrid?
R. Me da igual, pero va a ser una semifinal [Alemania-España] muy competida. Nosotros la podemos ver relajados.
P. ¿Cuál es la clave de esa semifinal?
R. España es más técnica, pero Alemania está muy fuerte físicamente y como equipo.
Tras la marcha de Robben, aparece Sneijder, el último en ducharse después de haber ido al fondo norte del estadio a saludar a los aficionados holandeses. Sneijder responde en italiano. Pero es muy escueto. No quiere distracciones. "Sólo pienso en la final. Quiero ganarla. Y después ya se hablará del Balón de Oro y todo lo demás". ¿A quién? "A España", añade el madridista Rafael Van del Vaart, que se añade a la charla y aporta un elemento sentimental. "Toda mi familia es española. Para mí sería un sueño una final Holanda-España".
