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EL DIÁLOGO SOCIAL

El Gobierno utiliza la crisis de UGT para acusar al PSOE de apoyar la huelga general

Jordi Sevilla responde que los socialistas ya han dejado clara su oposición a un paro general

El Gobierno trasladó ayer a la arena política el diálogo social. Con la crisis generada por la dimisión del dirigente de UGT Pedro Díaz Chavero como telón de fondo, el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, lanzó un ataque en toda línea al PSOE. Rato culpó al principal partido de la oposición de intentar romper el diálogo social y de pretender la convocatoria de la huelga general con que amenazó UGT hace unas semanas. No es ésta la idea que maneja el PSOE. Los socialistas se han pronunciado varias veces, en público y en privado, contra esta posibilidad. Por otra parte, se han mostrado muy críticos con el 'pactismo' de CC OO con un Gobierno que ha aprobado por decreto una reforma laboral. Y prefieren que, si hay descontento, 'se manifieste en las urnas'.

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De hecho, nada más conocerse la intención de UGT, el secretario general de los socialistas, José Luis Rodríguez Zapatero, llamó al líder del sindicato, Cándido Méndez, para decirle que la convocatoria era 'un disparate', según aseguran fuentes de la ejecutiva del PSOE. Esto no es obstáculo para que los socialistas respalden a UGT en su desacuerdo con la reforma laboral aprobada por decreto y con la reforma de las pensiones pactada entre CC OO y el Gobierno y a la que se ha adherido la CEOE. El PSOE no entiende que Comisiones haya alcanzado el último acuerdo sobre pensiones con un Gobierno que ha aprobado 'vía decretazo' la reforma laboral, añaden esas fuentes. Tampoco se comparte el contenido de ese acuerdo, aunque reconocen que aporta elementos positivos.

En este clima enrarecido, Rato situó al PSOE como principal responsable del fracaso en el diálogo. 'Es lamentable', dijo, 'la injerencia política del partido socialista en el diálogo social' y su intento de 'evitar que fructificara e, incluso, su pretensión de que en España se planteara en 2001 una huelga general'. 'Sería conveniente', añadió, 'que no intentase boicotear el diálogo con posiciones partidistas'.

La respuesta socialista fue inmediata e igualmente cargada de agresividad. El portavoz de Economía, Jordi Sevilla, tras calificar de 'tontería' las palabras de Rato, recordó el rechazo a una huelga. 'El vicepresidente', añadió, 'está nervioso por su incapacidad para solucionar problemas como el de la inflación, la pérdida de competitividad, los aumentos salariales, la siniestralidad laboral, la paralización de la flota pesquera o la situación creada tras malvender Iberia'. 'Tal vez está arrepentido de haberse retirado de la carrera por la sucesión y ahora necesita hacer méritos para sacar la cabeza de nuevo', remachó.

'Hace falta', incidió Sevilla, 'tener mucha cara para, a escasos 15 días de haber roto el diálogo social con un decreto regresivo de reforma laboral, buscar ahora echar la culpa al principal partido de la oposición'. El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, recordó que el PP apoyó la huelga general de 1988 (el 14-D) contra el Gobierno socialista en 'una actitud absolutamente demagógica e irresponsable'. Chaves era ministro de Trabajo en aquellas fechas y, antes, fue dirigente de UGT.

El enfrentamiento dialéctico se trasladó a la sesión de control al Gobierno. Rodríguez Zapatero, preguntó a José María Aznar si había abandonado 'el diálogo' como forma de orientar su acción y enumeró los asuntos en los que no ha habido pacto. Esta pregunta fue presentada tras la ruptura de la negociación entre sindicatos y patronal sobre la reforma laboral y antes del acuerdo sobre pensiones; pero el presidente exhibió este pacto CC OO para contraatacar.

Luego le dijo a Zapatero que practique el diálogo en su partido. 'Espero que lleguen a acuerdos sobre muchos temas aunque al día de hoy parece imposible'. Rato, en esa sesión, aseguró que el diálogo sigue siendo un instrumento 'imprescindible'. 'Pero debe haber un requisito y es que no se intente politizar a los interlocutores sociales como se hizo en años anteriores con tan pésimos resultados'.

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