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Esperanzas sin fecha para Turquía

La Unión Europea se resiste a la presión de Estados Unidos para que empiecen las negociaciones de una futura adhesión

Carlos Yárnoz

Los vientos europeos corren estas semanas a favor de Turquía. La exigencia de Ankara de que la UE fije una fecha para iniciar las negociaciones de adhesión no se verá colmada este año, pero en la cumbre europea de diciembre, en Copenhague, los Quince ofrecerán un 'horizonte temporal' al respecto, según aseguran fuentes oficiales del Consejo y de varias representaciones permanentes en Bruselas. Sólo un eventual Gobierno islamista tras las elecciones de ayer frenaría a los Quince.

El Reino Unido, España, Grecia, Francia y, desde la pasada semana, Alemania están de acuerdo en fijar ese horizonte temporal que evite una crisis política con Turquía, que ahora tiene la llave para un acuerdo UE-OTAN que convierta en operativa la Fuerza de Intervención Rápida de la Unión. Austria y Luxemburgo se muestran reticentes a la idea.

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La mayoría de los Quince, en todo caso, consideran que ese horizonte temporal no puede ir más allá de 2004, año en que entrará en la UE Chipre, pero solamente la zona grecochipriota de la isla si no hay antes un acuerdo de unificación, algo que irritaría al Gobierno turco si además no se fija antes una fecha para empezar a negociar su adhesión. Ankara pidió entrar en la UE en 1987, pero su candidatura sólo fue admitida 12 años después. Junto a los citados países, Estados Unidos es el que más presiona para que empiecen las negociaciones.

El problema con Turquía es sólo uno más para el complejo calendario que tienen por delante los Quince y, dentro de dos años, los Veinticinco, una vez incorporados al club Estonia, Lituania, Letonia, Hungría, República Checa, Polonia, Eslovaquia, Hungría, Malta y Chipre. Hasta el punto de que, a pesar del empujón dado al proyecto europeo en las dos últimas semanas, tanto en la Comisión como en el Consejo consideran muy difícil que se cumplan las previsiones.

El principal inconveniente práctico reside en el largo periodo que será necesario para que los Quince y los 10 candidatos ratifiquen el Tratado de Adhesión, que será aprobado la próxima primavera. El de Niza, por ejemplo, fue aprobado en diciembre de 2000 y ha quedado ratificado el mes pasado, aunque el segundo referéndum irlandés retrasó meses el proceso. En todo caso, a los complejos procedimientos parlamentarios se sumará el hecho de que algunos gobiernos, como los de Polonia, Eslovaquia y Malta, han anunciado su intención de convocar referendos.

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Por todo ello, será prácticamente imposible que el de adhesión esté ratificado antes del 1 de enero de 2004, la fecha de referencia para el ingreso de los 10 nuevos países. Hoy, la mayoría de los Quince y la Comisión se inclinan ya por fijar la entrada de los 10 socios en junio de 2004, coincidiendo con las elecciones al Parlamento Europeo, o incluso en enero de 2005, coincidiendo con la posible entrada en vigor de un Tratado Constitucional para la UE.

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Sobre la firma

Carlos Yárnoz
Llegó a EL PAÍS en 1983 y ha sido jefe de Política, subdirector, corresponsal en Bruselas y París y Defensor del lector entre 2019 y 2023. El periodismo y Europa son sus prioridades. Como es periodista, siempre ha defendido a los lectores.

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