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Plan de choque ante la crisis libia

El Ejecutivo se hará cargo de la rebaja de precio en cercanías pero no en bus y metro

Habrá una reunión con Madrid y Cataluña para fijar la aportación económica

El Gobierno se hará cargo del coste de bajar las tarifas de cercanías un 5% durante cuatro meses en Madrid y Barcelona, según anunció ayer el vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba. Sin embargo, no fue claro con los pormenores. Fijarán una reunión, dijo, con representantes de ambas comunidades para negociar los detalles. "Si es por dinero, estamos dispuestos a ponerlo, pero solo en lo referente al tren", puntualizó al final de su larga intervención. La Generalitat ya lo dejó claro días atrás y volvió a insistir ayer: solo bajarán el precio de Rodalies (el servicio de cercanías, cuya gestión le fue transferida) si puede rebajar también metro y autobús. Madrid también insiste en que solo con una rebaja global la medida tendrá sentido.

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El titular de Movilidad de Cataluña celebró que el Gobierno, que había negado que fuera a cargar con la factura de la bajada del precio en Cataluña, rectificara ayer y se mostrara dispuesto a negociar. Sin embargo, indicó que quedan a la espera de "conocer los detalles del decreto de aplicación de estas medidas".

Barcelona y las comarcas del área que la envuelven llevan años implantando un sistema de tarificación unificada, es decir, con billetes y abonos que funcionan indistintamente en Rodalies, metro, autobús y Ferrocarrils de la Generalitat. Aunque sigue existiendo un billete de tren de cercanías exclusivo, el Ejecutivo autónomo ha tratado de incentivar el abono de uso común, por lo que ahora, de aplicar una medida de reducción de precio, exige hacerlo en la tarifa conjunta para todos los transportes y no premiar la de Renfe.

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El billete sencillo solo para cercanías cuesta actualmente en Barcelona 1,45 euros (10 céntimos más que el de Madrid, que sí experimentará seguro la bajada del 5%). El abono de 10 viajes solo de Renfe cuesta 7,95 euros. El mismo abono, pero de uso común con los otros transportes, 8,25 euros. A este último, el título más usado en Cataluña, no llegaría la rebaja tal y como la planteó ayer Rubalcaba.

"No tendría sentido hacer un programa para incentivar el transporte público y bajar solo el tren. La rebaja debe extenderse a metro y autobús. Pero nosotros no vamos a pagarlo, porque es una idea del Estado que además nos insiste en que debemos controlar el déficit", explicaron ayer fuentes de la Generalitat. Han calculado que la rebaja de precio en todo el sistema durante un año costaría cerca de 26 millones de euros. Si la medida se aplica solo cuatro meses, el coste sería de unos 6,5 millones.

La Consejería de Transportes de Madrid calcula que la medida allí supondría un coste de 15 millones en dicho periodo, ya que se ingresan por tarifa unos 900 millones anuales. En el caso de Madrid el uso del cercanías es residual: solo el 4% de los viajes son en tren, y el resto corresponde a metro y autobús. Además, dentro de ese 4%, el uso del billete sencillo de cercanías es mínimo, ya que la mayoría de los viajeros de tren utiliza el abono de transportes mensual, que también le permite ir en autobús y metro. Para que realmente hubiera un efecto sobre el precio del transporte público tendrían que bajar estos títulos. "Y las tarifas de los abonos no corresponden a Fomento, sino al Consorcio Regional de Transportes", recordó el consejero madrileño.

La Comunidad de Madrid, gobernada por el PP, sigue considerando la propuesta del Gobierno una "ocurrencia", en palabras del consejero de Transportes, José Ignacio Echeverria, que se mostró muy escéptico con el anuncio del Gobierno central de que asumirá los costes, porque, según aseguró, no ha tenido ninguna explicación detallada de la propuesta. "Queremos hablar, como lo hemos hecho siempre, pero con rigor, con seriedad y sabiendo dónde se va", aseguró.

Echeverria cuestionó que la medida esté pensada para apenas cuatro meses y relacionó esta limitación de tiempo con las próximas elecciones autonómicas y municipales, que se celebran el 22 de mayo. "No sabemos por qué solo cuatro meses. Y ¿cuándo? ¿de aquí a las elecciones? ¿Y tendremos que subir otra vez las tarifas después de elecciones?", se preguntó.

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