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La reestructuración del sistema financiero

La tercera caja de ahorros, en peligro

Cajastur da por rota la 'fusión fría' con CAM por las reticencias de esta a la cesión de poder en el nuevo consejero delegado - El Banco de España convoca conmina a las cuatro entidades a resolver sus diferencias

Cajastur ya da por muerta la fusión virtual (SIP) que iba a llevar a cabo con Caja Extremadura, Caja Cantabria y Caja Mediterráneo (CAM) ante la negativa de esta última a delegar facultades en el nuevo consejero delegado. Este puesto iba a ser ocupado por el actual dirigente de la entidad asturiana, Manuel Menéndez.

Un portavoz oficial de la caja asturiana ha señalado esta mañana que "los contratos se aprueban o se rechazan en su integridad, pero no por partes", en clara referencia a la decisión que tomó ayer el Consejo de Administración de la CAM según la cual se acordaba aprobar el contrato de integración a la nueva entidad pero con "algunos matices respecto a las condiciones de gobierno corporativo". Fuentes de la caja han manifestado que este pronunciamiento "pone en peligro y al borde del fracaso" un pacto que iba a constituir el quinto grupo financiero español y la tercera caja de ahorros tras los SIP que lideran La Caixa y Caja Madrid.

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Ante esta situación, el Banco de España se ha reunido esta tarde con representantes de las cuatro cajas, según una fuente cercana al proceso consultada por Efe. En el encuentro no han estado ni el gobernador de la institución, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, ni el subgobernador, Javier Aríztegui.

Antes de la cita, el Banco de España no ha querido hacer declaraciones oficiales, aunque fuentes de la institución han afirmado que tratarían de evitar la ruptura de la operación y conseguir reconducir la situación generada. Además, han remarcado que el acuerdo no se ha roto y todavía hay plazo para arreglar las diferencias, que creen que son salvables. En el supuesto de que se confirmase esta ruptura, afectaría a los casi 1.500 millones de euros de ayuda que a finales de junio decidió conceder el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para financiar el desarrollo de la operación.

Tras las declaraciones efectuadas por su potencial socio, CAM ha querido rebajar el tono de la situación y se ha reafirmado en que su voluntad es continuar con la operación. Además se ha querido mostrar la disposición de la entidad alicantina a seguir adelante con la operación y su deseo de que "todo salga bien".

El acuerdo inicial fijaba que el nuevo grupo, la CAM, una caja que prácticamente dobla los depósitos y activos de la asturiana, tendría el mismo peso que Cajastur, considerada como una de las entidades más solventes del país. En este nuevo grupo, ambas entidades tendrían un 40% de participación (tenida ya en cuenta la absorción de Caja Castilla-La Mancha que adquirió la asturiana), Caja Extremadura se quedaría un 11% y Caja Cantabria el 9% restante.

Cajamar Caja Rural y Caixa Rural Balears acuerdan su fusión

Cajamar Caja Rural y Caixa Rural Balears han acordado su fusión, de manera que la entidad resultante, cabecera del Grupo Cooperativo Cajamar, se situará en el puesto 16 del ranking nacional de entidades financieras, con más de 45.500 millones de euros de volumen de negocio, 28.600 millones de activos, 5.100 empleados y 998 oficinas en 36 provincias.

En una nota conjunta, ambas entidades han señalado que la fusión se plantea en el actual escenario de reestructuración del sistema financiero español, y del sector de las cajas rurales en particular, ante el que ambas entidades coinciden "en la necesidad de diseñar e impulsar nuevas alianzas estratégicas que contribuyan a reforzar la posición competitiva del sector de cajas rurales en España".

La suma de Caixa Rural de Balears y Cajamar Caja Rural mejorará su posición en el mercado, consolidará la política de diversificación de su actividad, aumentará la dimensión de la red comercial, reforzará las estructuras de gestión y aprovechará las economías de escala, según han apuntado.

Se trata de dos cajas rurales plenamente "complementarias", puesto que "no existe solapamiento de oficinas ni de puestos de trabajo en su actual estructura territorial". En este sentido, los actuales servicios centrales de Caixa Rural Balears se convertirán en la sede institucional y de negocio de Cajamar Caja Rural en el archipiélago balear, en la que su máximo representante institucional será Gabriel Roca i Roca, actual presidente de Caixa Rural Balears, y su director y primer ejecutivo Antonio de Parellada Durán, director general de Caixa Rural Balears.

La fusión de Caixa Rural Balears y Cajamar Caja Rural elevará su red comercial a 998 oficinas, con 5.100 empleados, 690.000 socios y más de 2,3 millones de clientes en Andalucía, Asturias, Aragón, Baleares, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana y Región de Murcia, así como en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

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