El PNV exige a ETA el cese total y definitivo de la violencia y rechaza su tutela
Emplaza a la izquierda 'abertzale' a hacer frente a la banda
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha señalado, en un receso de la reunión de la ejecutiva de ese partido, que la sociedad vasca "sigue esperando" porque el comunicado de ETA no es el que se aguardaba y ha dicho a la banda que es ella la que está en deuda con quienes reclaman su final y no a la inversa.
La decisión de no realizar asesinatos, comunicada ayer y supuestamente adoptada hace ya meses, es "un paso que precisa para ser creíble del abandono definitivo de la violencia", ha añadido, en una petición coincidente con la realizada por los gobiernos vasco y central .
Alivio y ambigüedad
El dirigente peneuvista se ha congratulado del "alivio" que supondrá para quienes sufren la amenaza directa de ETA saber que no habrá atentados, pero ha añadido: "No es de recibo jugar con la ambigüedad" y dejar en el aire el riesgo y la interpretación libre sobre una eventual vuelta atrás en esa decisión. El PNV exige también el cese de las acciones de extorsión económica, de información o aprovisionamiento, amenazas o sabotajes callejeros.
A la izquierda abertzale política le ha pedido que aproveche la oportunidad de pronunciarse "ante ETA" para que la interpretación de su apuesta por vías políticas pueda ser "irreversible". El dirigente del PNV, que se ha limitado a leer un comunicado sin admitir preguntas, ha señalado que en la decisión sobre el futuro de la sociedad vasca "pueden y deben participar todas las sensibilidades ideológicas" y ha dicho que su partido tiene "disposición a trabajar con todas ellas".