El CSD impugnará el reconocimiento internacional del patinaje catalán

El Consejo Superior de Deportes (CSD) abordó ayer el reconocimiento de la Federación Catalana de Patinaje (FCP) por parte del comité ejecutivo de la Internacional (FIRS). El secretario de Estado en funciones, Juan Antonio Gómez Angulo, convocó para hoy, con carácter de urgencia, al presidente de la española, Antoni Martra, y anunció además que impugnará la decisión y la denunciará ante el Comité Olímpico Internacional (COI). El PSOE, que próximamente formará Gobierno, tampoco ve factible la participación de selecciones autonómicas en las grandes competiciones.

El caso del hockey sobre patines cobró ayer decididamente un tono político con un CSD en funciones, esperando el traspaso de poderes a los dirigentes que nombre el próximo Gobierno del PSOE. Pese a ello, el secretario de Estado para el Deporte, Juan Antonio Gómez Angulo, reaccionó, decidido y directo, moviendo todos los cables que lleven a la impugnación y anulación de una medida que, si se mantiene, hará posible que una selección española pueda tener como rival a una autonómica en un torneo oficial. Reclamará ante el COI y la Asociación Internacional de Federaciones Deportivas y reclamará a Matra que se pronuncie de la misma forma ante los miembros de la Asamblea y del Comité Ejecutivo de la FIRS. La decisión del Ejecutivo de la FIRS deberá ratificarse en la asamblea general, prevista para noviembre.

La politización llegó por parte del PP catalán, que intentó ver una contradicción entre la postura oficial del PSC en su comunidad -donde forma Gobierno con Iniciativa per Catalunya y Esquerra Republicana de Catalunya, que reivindica la formación de un Comité Olímpico Catalán y la participación de la selección catalana en todas las competicones, a todos los niveles, en todos los deportes- y la del PSOE en España. Y todo porque el PSC había pedido "respeto a todo el mundo por las decisiones tomadas por las federaciones deportivas en aplicación de las normas que corresponden en cada caso" y había felicitado a la Federación Catalana de Patinaje por su reconocimiento internacional.

"No aceptaremos que una reivindicación política se movilice por cauces deportivos", dijo Rafael Blanco, coordinador del programa electoral deportivo del PSOE y presidente de la Federación Española de Natación; "no se pueden utilizar las federaciones con motivos políticos, como arma arrojadiza, y alterar la paz del deporte español, en el que no aprecio inquietud por el asunto de los derechos de las selecciones autonómicas".

Rafael Blanco, que habló a título personal, sin arrogarse la representación del PSOE, ahondó en la postura oficial, expresada poco antes por José Blanco, secretario de Organización de los socialistas, quien declaró: "Entendemos que para los intereses generales de nuestro país es conveniente tener unas selecciones que representen al conjunto del Estado".

Fue en la Ley del Deporte de 1990, impulsada por el PSOE y aprobada en periodo socialista, en la que se estableció que por delegación del Estado corresponde la representación del deporte español a las federaciones, que lo gestionarán por delegación.

"En la nueva época política en la que entramos, en la que imperará un clima de diálogo distinto", dijo Rafael Blanco, "habrá espacio para poner sobre la mesa diversas propuestas, con el mayor respeto a todas. Habrá margen para hablar de algunas, como las presentadas por el PSC, que hablan de competiciones amistosas y de otro tipo, nuevas, de jóvenes, de ámbito regional europeo, que ayuden a construir la Europa de las regiones. Pero donde no hay margen es en las grandes competiciones mundiales o europeas. La doctrina en la que nos movemos es la del COI, que sólo acepta como comités olímpicos nacionales a los de los Estados independientes reconocidos por la comunidad internacional".