_
_
_
_
_
CRISIS EN IRAK

El ejército turco concentra numerosas tropas y aviones cerca de la frontera del Kurdistán iraquí

Cinco días después de que el Ejército de Sadam Husein decidiera cruzar el Paralelo 36, al norte de Irak, y tomar Arbil, la capital del kurdistán iraquí, Turquía movilizó ayer un elevado número de tropas en la zona de Diyarbakir, al oeste de Turquía. Varios testigos indicaron que el movimiento de militares era completamente inusual. "No he visto carros de combate, pero han estado llegando soldados en autobuses y aviones a lo largo de todo el día" dijo un residente a la agencia Reuter. La ministra turca de Exteriores, Tansu Çiller, aseguró ayer que no era inminente una acción en el Kurdistán iraquí.

Más información
Sadam Husein reduce el tono de las críticas contra Estados Unidos
Sadam, el robot
Francia anuncia que no realizará vuelos en la nueva zona de exclusión aérea
Londres presenta en la ONU un proyecto de resolución que elude la condena a Bagdad

"Lo que está en nuestros planes es una operación. Lo que está nuestra agenda es impedir las infiltraciones" de los guerilleros Partido de los Trabajadores Kurdistán (PKK), dijo Çiller. Pese a estas palabras, el dispositimilitar es muy superior al de as ocasiones en una zona habiImente conflictiva y acostumda a los movimientos de tro. El PKK lleva 15 años luchan contra el Gobierno de Ankara demanda de autonomía. Muchas de sus bases están en las montañas fronterizas con Irak y en el interior de Irak, donde comparte terreno y rivalidad con los grupos kurdos iraquíes, la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK), de Jalal Talabani, y del Partido Democráo del Kurdistán (PDK), de Masud Barzani, a quien Bagdad ha apoyado en la conquista de Arbil.De la base aérea de Diyarbakir han despegado en las últimas horas numerosos aviones F- 16 de fabricación norteamericana. La concentración de tropas en Diyarbakir se produce tan sólo 24 horas después de que el miércoles se filtrara que Turquía estudia la creación de una zona de seguridad en el norte de Irak, similar a la de Israel en el sur de Líbano, para dificuItar al máximo las incursiones de las guerrillas del PKK. Esta posibilidad no desmentiría necesariamente la literalidad de las palabras de ayer de Çiller, quien ayer aseguró que en su agenda sólo está

pedir esos ataques.

Fuentes diplomáticas en la región confirman que Turquía tiene en este caso intenciones de establer un cordón sanitario permanente. El PKK todavía posee bases en el norte de Irak. Los kurdos turcos que se han mantenido relativamente al margen del actual conflicto entre el PDK y la UPK han salido indirectamente en defensa de

Barzani, afirmando que "vengarán las matanzas de nuestros hermanos de la PDK". Talabani, líder de la UPK, quien coquetea con Occidente e Irán por igual, combatió en el pasado al PKK, haciéndole el trabajo sucio a Ankara.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Región muy volátil

Una incursión turca en estos momentos está destinada necesariamente a complicar la volátil situación en el norte de Irak, donde carros de combate y tropas iraquies ayudaron el pasado fin de semana al PDK a tomar la capital Arbil. Esta intervención, al norte del Paralelo 36, impuesto por Estados Unidos, Francia y el Reino Unido en 1991 tras la guerra del Golfo, provocó los dos ataques norteamericanos, el martes y miércoles, con misiles Tomahawk y crucero contra instalaciones militares iraquíes en el sur del país.En marzo de 1995, una fuerza de 35.000 soldados turcos penetró 40 kilómetros dentro del territorio iraquí para destruir bases del PKK en lo que constituyó la operación militar más importante de Turquía en los últimos años. Turquía consiguió así, en seis semanas, destruir una serie de bases logísticas y arsenales del PKK, además de diezmar sus fuerzas. Esta intervención contó con el apoyo indirecto de Irak. Esta vez puede suceder lo mismo.

Numerosos analistas señalan que el PKK ya se ha recobrado de aquellos reveses y que ahora puede aprovechar el caos reinante para embarcarse en nuevas operaciones contra objetivos turcos en una amplia zona al norte de la frontera turco-iraquí.

La prensa turca daba ayer por hecho que el Ejército de Ankara va a ocupar una franja en el norte iraquí. "Ankara se prepara para aplicar una solucion radical, afirmó el diario Sabah. "Las Fuerzas Armadas entrarán en Irak y se quedarán allí", agregó. Un portavoz del Ministerio de Exteriores turco citado por la agencia Reuter afirmó que la franja a lo largo de la frontera internacional tendría entre 5 y 10 kilómetros de profundidad. El portavoz del Departamento de Estado norteamericano Glyn Davies confirmó que Turquía había anunciado sus intenciones a Clinton. EE UU aprueba una operación temporal.

En el lado iraquí del Kurdistán prosigue la confusión. Hay noticias de nuevos combates entre las facciones kurdas en el norte de Irak, muy similares a aquellas que sirvieron de excusa a la intervención de Bagdad, el fin de semana, y que generó los ataques norteamericanos. Algunas informaciones procedentes de la región de Arbil señalaban que tropas iraquíes apoyadas por 150 carros de combate tomaron posiciones al sureste de la capital kurda para apoyar a guerrilleros del PDK de Barzani en una nueva ofensiva contra la UPK.

En un comunicado enviado a agencias internacionales de noticias, la UPK dijo que las tropas iraquíes combatían con el PDK en las inmediaciones de Bestana, 25 kilómetros al sur de Arbil. Bestana está pocos kilómetros al norte, del Paralelo 36, dentro de la zona de exclusión. La continuidad de la presencia militar iraquí en esa zona era considerada anoche como "un elemento irritante que impide atenuar la tensión".

La UPK, que controla gran parte del noreste iraquí, fue expulsada de Arbil el sábado en una operación conjunta del Ejército iraquí y el PDK. "Las recientes ganancias de Sadam Husein en el Kurdistán no han hecho más que redoblar su decisión de seguir atacando al pueblo kurdo", dijo el comunicado de la UPK. El PDK, en otro comunicado, invitó a representantes estadounidenses a comprobar la situación sobre el terreno y acusó a la UPK de vínculos con Irán.

Funcionarios de la ONU en Arbil dijeron que, si bien existen indicios de que el Ejército iraquí permanece en la vecindad, no hay pruebas de que esté participando en los combates. El Pentágono tampoco tenía constancia de ello. Incluso la CIA confirmó que se estaban retirando.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_